Capitulo 7.

-Chicas, me voy ya, que tenemos que acabar de preparar todo lo del concierto y eso. ¿Nos vemos esta noche?
-Eso no lo dudes-dijo Kath.
Nos abrazó a todas, formando una piña y se fue. Las miré y me puse a llorar. Había conocido al chico que más quería en el mundo. Era feliz. Las chicas me abrazaron y me fui al baño para limpiarme la cara. Me duché y salí para vestirme. Quedaba 1 hora para que empezara el concierto, así que cuando estuvimos ya preparadas nos fuimos para el recinto dónde hacían el concierto. No tuvimos que caminar mucho, ya que el hotel nos quedaba cerca, pero lo que sí tardamos en encontrar fue la entrada para ir a la sala VIP. Tardamos un rato, pero al final lo encontramos. El hombre que estaba allí nos cortó un trozo de entrada y nos hizo pasar a una sala enorme, había butacas y tele. Pero al tener el escenario casi al lado, nos miramos y supimos las tres que en ese momento no nos íbamos a sentar en todo el concierto, y que pasábamos de mirar por la tele, ya estábamos hartas de verlos sólo por pantallas. De repente las luces se apagaron y en la gran pantalla del escenario vimos cómo iba la cuenta atrás. Cuando se fue el 1 agarré tan fuerte a las chicas como pude, sabía que meiba a emocionar más que nunca. En ese instante sólo se veían los flashes de la gente que hacía fotos a todo. No podía moverme, estaba helada. Estaban ahí, los cinco, sonriendo, con esas sonrisas tan perfectas que tenían. Niall se dio cuanta que estaba en la sala VIP, me vio y me sonrió. Empezaron cantando WMYB, y ya lloraba.
Dos horas y media después.
Me había pasado todo el concierto llorando, pero sin perder la sonrisa. El guarda que nos tapaba la puerta al camerino de los chicos se apartó al fin y pudimos pasar. Abrió la puerta y los vimos ahí, de pie, con sus infinitas sonrisas. Intentaba secarme las lágrimas todo el rato, pero por más que intentaba dejar de llorar no podía. Niall lo vio y vino a abrazarme.
-Nada de lágrimas pequeña, sabes que no me gusta que llores.
Le abracé aún más, quería sentirme protegida. Puse mi cara en su pecho, pero las lágrimas seguían cayéndome mejillas a bajo.
-Niall, me dan miedo. No respiran...-dijo Hazza.
-3...2...1...-dijimos Niall y yo a la vez.
En cuando acabamos de decir "1..." Kath se tiró encima de Harry, y Emma casi se cae al suelo de no ser porqué Liam fue a sujetarla.
-Siempre les pasa, chicos. Y más siendo vosotros...
-¿Nosotros? ¿Qué tenemos de especial?-preguntó Lou
-Harry es el ricitos de Kath, siempre le ha querido más que a nada. Y Emma... bueno, ella y Liam son tal para cuál, os lo digo yo.
-¿Y tú?
Miré hacia Niall y los chicos lo comprendieron todo.
-¡Te estás poniendo roja!-gritó Hazza
-Ala, dilo más fuerte, que me parece que los pingüinos del Polo Norte no te han oído.
Kath dejó de abrazar a Harry, y empezó a ponerse colorada.
-Lo, lo siento Harry.
-¿Por qué? Que yo sepa, abrazar no es ningún delito...
-No me sonrías así Harry, que me muero.
-¿Así, cómo?
-Así, cuando haces esa media sonrisa, ya sabes... Da igual, déjalo.
A Em ya se le había pasado un poco y estaba hablando tranquila, pero un poco nerviosa con Liam. Saqué la cámara de la bolsa y le dí un codazo a Niall. Que asintió con la cabeza. Les hicimos una foto a Liam y a Em mientras hablaban, y otra a Kath roja como un tomate hablando con Harry.
-Alice, de aqui nada os tendréis que ir, dame tu mobil y así hablamos siempre.
-¿Perdona? Sabes dónde vivo, sorpréndeme.-le dije con una sonrisa.
En ese instante el guarda apareció otra vez para decirnos que teníamos que salir ya, abrazamos a los chicos uno por uno y salimos. No quise mirar hacia atrás, porqué sabía que si lo hacía, no podría irme.