dijous, 24 de maig del 2012

Chicas, soy María, ayer no colgué los dos capítulos que os dije,sinó uno, pero tenía un examen muy chungo, y estoy muy contenta por qué he sacado una nota, entre el 9 y el 10. Bueno, deciros que Míriam me ha emocionado, con un possible final de novela, pero wait, no sufráis aún falta mucho. Le dedicó a ella. Te quiero chuchi. Espero que os guste, Míriam colgará otro hoy, si le da tiempo claro. Beesis!


Narra Kath.

Me encantó el vestido que me compró Zayn, era un amor de chico, de verdad.
Me vestí, y Louis vino a peinarme. Empezó rizando-me el pelo, y luego, haciendo un recogido alborotado, Alice, se puso lo más cuqui, que pudo, y le planché el pelo. Emily, ya no estaba tan perdida, como antes, se relacionaba más, sobretodo en Zayn y Louis.
Llego Harry, Liam, Niall y Emma. El ultimo en entrar fué el señor Rulitos, al que pille por la espalda, y le tapé los ojos con una venda, que se intentó quitar.
-HARRY STYLES. No te quites la puñetera venda.
-¿Quien eres para decirme que no?
-¿Tu novia? Soy Kath, gilipondrio.
-Ya lo sé, la que habla si, pero la que me ha puesto la venda, quien sabe.
Le besé, y le mordí el cuello.
-Vale,eres tu.
-Va, con cuidado, que nos vamos.
-¿Donde?
-Ah, sorpresa.

Cerramos la puerta y salimos todos, menos Alice, Niall, Emma y Liam. Emma se estaba cambiando, y Alice y Niall, eran los que sabían donde estaba la discoteca. Ellos cuatro irían a cenar a un restaurante, que escogió Liam, y luego a la fiesta, un rato.

Cogí a Harry por las manos y me puse delante de él, lo hice entrar en la furgoneta. Se sentó, y yo encima de él. Llegamos a la fiesta, pero yo me lo lleve atrás, un pequeño callejón, donde se oía la música muy muy de fondo, era un pequeño bosque, me apollé en un arbol y le grité a Harry que se podía quitar la venda. Me miró, miró el vestido que llevaba y se acercó. Me dió un pequeño beso en los labios, y me cogíó en brazos.

-¿A que viene todo esto señorita Katherine?
-Ah, vale, no tranquilo, si no quieres que pasemos un buen rato en un fiesta Harold, no pasa nada.
-Anda tira, que fiesta?
Me soltó y fuimos hacía la fiesta.
-Ah, va, vamos. Entramos en la fiesta, que estaba llena de gente que no conocíamos. Nos sentamos en la barra y pedimos.

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